“Corcuera Abogados y Asesores de Patrimonio” nació en el año 1989, bajo la denominación “Corcuera&Asociados” por iniciativa de su fundador, D. José María Corcuera Brizuela, con la pretensión de crear un despacho especializado en el cuidado del patrimonio de sus clientes.
Ha pasado mucho tiempo desde entonces, suficiente para poder afirmar que la titularidad de un patrimonio, por modesto que sea, comporta para su titular una serie de problemas de muy distinta naturaleza. Desde soportar incumplimientos por parte de deudores o inquilinos, pasando por enfrentarse a contratiempos con las Administraciones Públicas (Hacienda, Seguridad Social…), hasta lidiar con situaciones inesperadas, como las creadas, con mayor frecuencia de la deseada, por entidades financieras que no fueron especialmente diligentes al aconsejar la colocación del dinero de sus clientes.
Y para contribuir a la ceremonia de toda esta problemática, no se puede obviar la casuística propia de los titulares de negocios, cuyas dificultades y conflictos pueden incrementarse de forma exponencial.
Así las cosas, nuestro Despacho se ha centrado en acompañar a nuestros clientes a la hora de afrontar todas estas dificultades tan heterogéneas. Fruto de esa experiencia, el Despacho se ha organizado para responder de forma específica a las necesidades de particulares y empresas en dos sedes. Una de ellas dedicada a particulares, interviniendo en asuntos de índole jurídica, financiera y tributaria; y la otra orientada a negocios, prestando servicios de asesoramiento de empresas, contabilidad y fiscalidad, entre otros. Podrá ampliar la información sobre nuestras dos sedes en el apartado DÓNDE ENCONTRARNOS.
En la actualidad, nuestro Despacho está formado por un equipo técnico, compuesto por tres abogados, un economista, una diplomada en empresariales y un asesor fiscal, y, además, un equipo asistencial, de otras dos personas, que sirve de apoyo y contribuye al buen funcionamiento de nuestra organización. En cuanto a la capacitación de nuestros profesionales técnicos, procedentes de experiencias laborales previas en sectores tan exigentes como la banca o la consultoría, su formación se encuentra avalada por títulos de indudable autoridad como las Licenciaturas en Derecho, Derecho con Especialidad Económica, Ciencias Económicas, Diplomatura en Ciencias Empresariales o el Máster en Asesoría Jurídica cursados en, entre otros, la Universidad de Deusto o el I.E. Business School, una de las Escuelas de Negocios más prestigiosas a nivel mundial.